No todos los procesos personales son iguales aunque parezca que estamos hablando del mismo reto. Por ello, aunque opositar es un camino complejo para todas las personas, los obstáculos, la experiencia y el recuerdo que quedan sobre hitos como la decisión de empezar, la planificación y disciplina de estudio, las piedras en el camino y, al final, la cosecha final del éxito, es muy particular de cada opositar.
Lo que sí tienen en común todos nuestros opositores es la generosidad a la hora de compartir estas vivencias con el único fin de echar una mano a los que aún están nadando en contra de la corriente en la búsqueda de esa ansiada plaza de Subinspector Laboral de Seguridad y Salud. Así que aquí os va esta cuarta entrega del año, en la que uno de nuestros opositores más tenaces nos habla de su experiencia. Recomendamos que lo tengáis muy en cuenta porque ha demostrado ser un mago de la eficiencia y la productividad en el estudio. Además, como persona que desarrolló su carrera profesional en el ámbito de la PRL, concretamente como auditor, posee una posición habilitante de cara a sus apreciaciones y hemos estado muy atentos a las posibles no conformidades que haya podido detectar en nuestra labor como preparadores 😉
- Cuéntanos sobre tí, ¿por qué te animaste a opositar?
Llevo muchos años trabajando en el sector de la Prevención de Riesgos Laborales, en
una entidad auditora, y la verdad es que cuando salieron por primera vez estas
oposiciones allá por el 2017 me parecieron muy atractivas y una evolución natural del
trabajo que venía desarrollando. Me atrajo el hecho de “pasarme al otro lado”,
convencido que desde la Administración se pueden hacer muchas más cosas para
mejorar las condiciones de seguridad y salud de los trabajadores. En 2024, por una
suma de circunstancias personales y laborales, me decidí a probar suerte.
- ¿Cuánto tiempo dedicaste entre que empezaste y el aprobado final? ¿Cómo viviste el proceso?
Empecé en mayo de 2024, con mucho ánimo al principio, aunque mi trabajo me iba
limitando bastante el poder avanzar con los temas, no fue fácil sacar tiempo y con
continuidad; no obstante, la gran organización del temario que te facilitan los
preparadores, la planificación que te proponen del tiempo de estudio y la dinámica de
simulacros me dieron seguridad y ánimo suficiente para seguir.
Cuando hice el primer examen sinceramente pensé que había suspendido, las fechas
previas justo coincidió con un periodo de mucha actividad en mi trabajo y no le pude
dedicar el tiempo deseado; sin embargo, conseguí superarlo (con riña incluida de los
preparadores por mi falta de confianza y el tiempo perdido de estudio entre
exámenes, por haber dado por hecho que había suspendido y bajado los brazos); el
aprobar el primer ejercicio me dio una ración extra de la autoconfianza que me
faltaba. El segundo examen, ya sin la parte de Derecho, tenía la dificultad de
desarrollar los temas entre tanta variedad y extensión de los mismos. Para el tercer
examen, los simulacros específicos de preparación los supuestos prácticos se hicieron
fundamentales, ahí es un tú a tú con los preparadores para resolvernos las dudas y,
como dicen ellos, aclararnos las “zonas de grises” en la interpretación y aplicación de
la normativa.
- Sobre el contenido de la oposición, ¿tienes un tema preferido? ¿Un tema que no te gustaba? ¿Uno que te costó al principio y te acabó gustando?
Como tema preferido no sabría decir, quizás las partes comunes de la Ley de
Prevención y el Reglamento de los Servicios de Prevención, que me han acompañado
en el día a día de mi trabajo hasta ahora, pero bueno, cualquier tema de la parte de
PRL tiene su atractivo, realmente la seguridad y salud laboral abarca un campo
amplísimo de materias y normativas, y a veces da la impresión que nunca eres capaz
de abarcarlo todo.
Los temas que más me han costado estudiar fueron los relativos al RD 39/2015 del
procedimiento administrativo, una pesadilla al principio, pero sí que es verdad que al
final le deje de tener manía a esta parte del temario.
- ¿Cómo te sentiste al ver el aprobado? ¿Qué balance hacfes de todo el proceso? ¿Mereció la pena?
Cuando fue la apertura de plicas del último examen (momento que se pasa bastante
mal, la verdad, qué nervios!) pegué un salto hasta el techo al oír mi nombre, aún me
cuesta creérmelo.
El balance desde luego es muy positivo, en mi caso he tenido la fortuna de aprobar a la
primera y sigo sorprendido de ello, no me lo esperaba. Desde luego que merece la
pena, supone un gran esfuerzo, pero compensa con creces. Los preparadores nos
recordaban frecuentemente que, en estas oposiciones, se trata de una lucha contra
nosotros mismos, no contra otros opositores, aquí se ofertan más plazas que las que
luego se consiguen, con lo que no te quedas fuera por sacar menos nota que otros
compañeros, el aprobado depende de ti mismo.
- ¿Qué consejos darías a alguiente que esté pensando en empezar?
Que no se desanimen por el volumen del temario, es extenso, pero se puede con él;
sobre todo puede desaminar la parte de Derecho, que es la que nos resulta más ajena
a los que venimos de ramas técnicas, pero con el tiempo te vas haciendo con ella.
También el tema de estar trabajando te puede echar para atrás, pero siempre se
puede encontrar tiempo de estudio, aunque sea muchas veces a costa de robarle
tiempo al ocio y a la familia.
Yo ya había perdido el hábito de estudiar (al menos, con esta intensidad) y, sin
embargo, siendo constante en estudio, trabajando los simulacros y con el apoyo de los
preparadores, se consigue aprobar ¡¡doy fe!!.